La Policía capturó en Cartagena al ciudadano extranjero Javier Fernández Morales, de 53 años, con el alias de “Choki”, quien es requerido por las autoridades de España por el delito de abuso sexual a menor de 16 años.
La retención del ciudadano español se hizo por notificación roja de la Interpol.
A este sujeto, que tenía un tiempo de estar de vacaciones en esta ciudad, se le acusa de abusar sexualmente de una menor en dos ocasiones en el año 2016 utilizando la violencia para ello.
La retención fue el resultado de un trabajo minucioso, casi artesanal, que se extendió por dos meses en coordinación con la Policía Nacional de España. Durante ese tiempo, los investigadores deshilvanaron la rutina de “Choki” como quien sigue un rastro invisible. Cada movimiento, cada transacción, era una pista. Así lograron identificar patrones de comportamiento y ubicar cuentas bancarias vinculadas al sujeto, utilizadas en restaurantes, hoteles y establecimientos comerciales de la ciudad.
El cerco se fue cerrando hasta llegar a su refugio final: una embarcación tipo velero donde pasaba sus noches, discreta entre las otras naves atracadas en el Club Náutico de Cartagena. Allí lo encontraron, sin margen de huida, en la misma cubierta donde creyó estar a salvo.
Para la Policía Nacional de España, Javier Fernández Morales no era un fugitivo cualquiera: estaba entre los agresores sexuales más buscados de ese país. Ahora, tras su captura, será puesto a disposición de la Fiscalía General de la Nación, mientras se completan los trámites diplomáticos necesarios para su entrega a las autoridades que lo reclaman.