En el marco de la Cruzada Nacional contra el delito de la extorsión, la Policía Nacional, a través del Grupo de Acción Unificada por la Libertad Personal (GAULA) y en coordinación con la Fiscalía 1 especializada de Cartagena, ejecutó cinco órdenes de captura contra miembros de una banda dedicada a la extorsión en Cartagena. Entre los detenidos se encuentra una mujer de 60 años, conocida como “Xiomara”, abuela del cabecilla alias “El Flander”.
Tras meses de investigaciones y seguimientos, las autoridades lograron desmantelar esta organización que intimidaba y extorsionaba a propietarios de tiendas, farmacias, ferreterías y restaurantes en varios sectores de la ciudad. Alias “El Flander”, quien actualmente se encuentra recluido en la Cárcel de Máxima Seguridad de Girón en Santander, controlaba las operaciones de la banda desde prisión, donde manejaba contactos y coordinaba extorsiones al sector comercio de Cartagena.
Su abuela, “Xiomara”, era una pieza clave dentro de la estructura: se encargaba de visitar personalmente los negocios para obtener los números de contacto de los propietarios, que posteriormente eran utilizados para extorsionarlos. Además, “Xiomara” recibía el dinero de las extorsiones en cuentas de ahorro digitales, convirtiéndose en el enlace de confianza para las operaciones financieras de la red.
Otros miembros de la banda incluían a “Corozo”, quien reclutaba jóvenes para el grupo y organizaba la logística, y “Guavino”, responsable de intimidar a los comerciantes mediante amenazas y panfletos. Alias “Edwin” recibía gran parte de los pagos extorsivos. Las capturas se llevaron a cabo en los barrios Pozón, Blasdelezo y 20 de Julio, y fueron notificadas directamente a los capturados.
Esta banda criminal exigía montos que oscilaban entre 1 y 15 millones de pesos, afectando la tranquilidad y el patrimonio de pequeños y medianos comerciantes. La Policía Nacional reitera su llamado a la comunidad para que denuncien cualquier intento de extorsión a la línea gratuita 165 del GAULA o se acerquen a sus instalaciones en el Barrio Manga, Calle 25 con Carrera 24. Es fundamental que los ciudadanos actúen para prevenir que este delito siga perjudicando la paz y seguridad económica de los cartageneros y bolivarenses.