La noche del 7 de diciembre, Cartagena vivió una versión inolvidable de la tradicional Cabalgata de Velitas, marcada por un balance positivo que destacó el orden y la tranquilidad, aspectos que hacía años no se presenciaban en un evento de esta magnitud.
Organizada bajo la estricta coordinación de la Alcaldía Mayor de Cartagena, esta emblemática actividad en el Centro Histórico reunió a más de 1.000 caballistas y sus familias provenientes de diferentes rincones del país. La logística del evento incluyó la participación activa de la Unidad Municipal de Asistencia Técnica Agropecuaria (UMATA), el Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte (DATT), la oficina de Espacio Público, Gestión del Riesgo de Desastres y la Policía Metropolitana, con su grupo de Carabineros. Estas entidades garantizaron seguridad, bienestar animal y orden en cada etapa del recorrido por el cordón amurallado.
Adolfo Pérez, director de la UMATA, resaltó la excelencia de esta edición:
“Esta ha sido una de las cabalgatas mejor organizadas en años. El Centro Histórico permanece impecable, sin contratiempos, y la economía local ha recibido un impulso significativo. Familias cartageneras, nacionales e internacionales disfrutaron del evento, generando una dinámica económica que favoreció al turismo y al comercio popular.”
El entusiasmo de los asistentes fue evidente. Claudia Periñán, visitante desde Neiva, destacó:
“La organización fue excelente, el recorrido estuvo impecable y el bienestar animal estuvo garantizado. Sin duda, regresaré el próximo año.”
Por su parte, Luis Gabriel Moncayo, participante de Popayán, afirmó:
“La cabalgata estuvo genial. Los espacios estuvieron mejor organizados, lo que permitió un desarrollo fluido del recorrido. Este evento me asegura que regresaré cada año.”
Con el éxito de esta cabalgata, Cartagena inauguró oficialmente sus festividades navideñas, demostrando que, con planificación y compromiso, la ciudad puede revivir sus tradiciones de manera ejemplar. El orden, la seguridad y la participación ciudadana han sido los protagonistas de una noche que quedará en la memoria colectiva como un símbolo de la Cartagena que todos anhelan.