La cosecha de ajonjolí de la región tendrá, por fin, una vía idónea para llegar a zonas de comercio.
En el centro de Bolívar, donde por décadas las comunidades han vivido entre el polvo del verano y el lodo de los inviernos, una esperanza largamente postergada empieza a hacerse realidad. La Gobernación de Bolívar, bajo el liderazgo del gobernador Yamil Arana Padauí, adjudicó oficialmente la construcción de la vía que conectará a Magangué en Córdoba Tetón.
Más que una obra de infraestructura, se trata de una conexión vital entre dos territorios históricamente aislados, que ahora se integrarán física, social y económicamente. El proyecto fue adjudicado mediante licitación pública y contempla una inversión de $89.233 millones de pesos, con un plazo de ejecución de 20 meses, durante los cuales también se generarán empleos para las comunidades de la zona.
Se trata del trazado que va de los corregimientos de La Pascuala (Magangué) a Santa Lucía (Córdoba).
Los productores de ajonjolí tendrán, por fin, una vía idónea para sacar el producto en épocas de cosecha hacia Magangué, punto de comercio de la región.
“Esta vía no solo reducirá tiempos de desplazamiento: será un conector de oportunidades reales para la gente. Abrirá caminos al comercio local, facilitará el acceso a salud y educación, y permitirá que nuestros campesinos saquen sus productos con dignidad. Es una vía que trae progreso, integración y esperanza para Bolívar”, afirmó el gobernador Yamil Arana Padauí durante el anuncio.
La vía no solo impactará la economía regional, sino que fortalecerá el tejido social, acercando a familias, facilitando la movilidad escolar y reduciendo las brechas entre el campo y la ciudad. La obra responde a un clamor colectivo de las comunidades del centro del departamento, que por años han exigido condiciones de conectividad dignas.
Con esta adjudicación, la Gobernación de Bolívar reafirma su compromiso con una visión de desarrollo equitativo, sostenible y territorialmente inclusiva, llevando inversión pública y bienestar a las zonas que más lo necesitan.
Esta vía no es solo una carretera. Es un símbolo de avance y de unidad para miles de bolivarenses que, por fin, ven cómo el progreso llega, paso a paso, sobre un pavimento que ellos mismos han pedido por generaciones.