Mediante un Twitter, el presidente Gustavo Petro, exigió a la firma Jon Sonen respetar las reglas laborales
y calificó de deplorable el trato que recibió la joven Norelys Álvarez por parte de la Policía el día de ayer cuando fue a reclamar al almacén de La Serrezuela la liquidación que le deben hace dos años.
La mujer, cargando a uno de sus dos hijos menores, fue sacada esposada por la Policía del centro comercial.
Este medio contactó a la venezolana de 31 años y confirmó que hace dos años trabajó en el almacén y pese a a haber instaurado tutelas, que fallaron favorablemente y a tener desacatos a su favor, Jon Sonen no le ha pagado la liquidación que para la época era de dos millones de pesos.
“Yo soy una madre soltera que vive con sus dos hijos en una humilde casa de Vista Hermosa, y que desde hace tres meses no está trabajando. Por eso fui a reclamar la plata que me deben en Jon Sonen. Yo no soy una ladrona, soy una mujer que necesita y que en estos momentos no tiene ni siquiera para comer. Estoy pasando necesidades por eso fui a reclamar el dinero que me adeudan. Lo triste fue que salí esposada cómo si fuera una ladrona. Doy gracias a Dios porque sé que este caso tener una solución pronta”, dijo.
La mujer que en la mañana de hoy se convirtió en una celebridad, pued fue entrevistada por medios nacionales e internacionales, sólo espera que la indemnicen porque está necesitada de su dinero.
Cuenta que hace tres meses su mamá partido de Venezuela y aquí está sola en Cartagena.
Cierran tienda
Este medio conoció el Ministerio del Trabajo envió a dos representantes al almacén Jon Sonen de La Serrezuela, quienes decidieron sellar la tienda.
Se pronuncia Policía
El Comando de la Policía Metropolitana de Cartagena de Indias se pronunció advirtiendo que: “Hacia las 3:30 p. m. de ayer lunes se presentó un incidente en un centro comercial de la ciudad, luego de que una mujer, acompañada de unos menores de edad, ingresó en estado de exaltación a un local comercial con el propósito, al parecer, de hacer una reclamación por un tema laboral, según las versiones de personas presentes en el lugar, habría agredido verbalmente a los empleados, quienes requirieron al cuadrante de policía del Centro Histórico”.
“Tras recibir el llamado a través de la línea 123, los uniformados de la Policía Metropolitana de Cartagena acudieron al lugar y, según las indagaciones que son objeto de verificación, agotaron la mediación policial como vía para intentar resolver el inconveniente”, dice la Policía.
“Tras hacer uso de los recursos de mediación y con el propósito de garantizar la protección los derechos de los niños, de la misma mujer y de las personas que se encontraban en el establecimiento y que pudieran afectar su integridad, los uniformados procedieron a esposarla y a realizar expulsión de domicilio de conformidad con el artículo 177 de la Ley 1801 de 2016, como medio material de policía”.
“Una vez recuperadas las condiciones de convivencia y seguridad ciudadana, estando afuera del establecimiento se le retiraron las esposas a la mujer y se le impuso una orden de comparendo por el artículo 27, numeral 1 de la Ley 1801 de 2016 (Reñir, incitar o incurrir en confrontaciones violentas que puedan derivar en agresiones físicas, tipificado como un comportamiento contrario a la convivencia.). Adicionalmente, la mujer fue orientada y se le indicó que debe realizar el trámite legal de reclamación en el ámbito laboral ante las autoridades competentes y, al mismo tiempo, se informó a la Dirección Territorial del Ministerio del Trabajo-Regional Bolívar para que realice visita al establecimiento. Adicionalmente, este procedimiento fue reportado por la misma Policía ante el Ministerio Público”, indicó la Policía.