A la izquierda, Ever Rico Royero e Ivan Borrero, ex secretario de Hacienda, envuelto en el escándalo.
En medio de un torbellino mediático, las palabras incendiarias del diputado Ever Rico Royero resonaron al tildar al exsecretario de Hacienda de Bolívar, Iván David Borrero, como un “demonio degenerado”.
La polémica estalló cuando Borrero fue descubierto en una escena sexual supuestamente con dos mujeres en el Country Club de Barranquilla, el pasado 7 de enero, desatando un vendaval de críticas.
Ante este escenario, el gobernador Yamil Arana, quien apenas había designado a Borrero nueve días antes, mostró una firmeza inquebrantable al pedir la renuncia inmediata del secretario, subrayando su rechazo absoluto a conductas inapropiadas en la administración pública.
Ever Rico Royero celebró en la plenaria de hoy, la decisión, elogiando la entereza del gobernador en medio de un escándalo nacional. “Estamos en medio de un escándalo nacional y el gobernador sacó a este supuesto depravado sexual que fungía como secretario de Hacienda del departamento de Bolívar”, expresó.
Además, el diputado expresó la preocupación por este escándalo sexual pues aseguró que es funcionario de uno de los departamentos más turísticos de Colombia y “vienen a enlodar la imagen de Yamil Arana, que todavía no tiene el tiempo de vida para estar en un escándalo; viene a enlodarle la imagen a este muchacho que es nuestro querido gobernador ”, mencionó Ever Rico Royero.
No obstante, el diputado José García Turbay adoptó un tono más cauteloso, minimizando el impacto en la gestión al considerar el incidente como un asunto personal de Borrero. Mientras tanto, las autoridades iniciaron una exhaustiva investigación en el prestigioso Country Club, poniendo bajo la lupa la privacidad y conducta de funcionarios públicos y otras personas involucradas.
El Country Club, epicentro de la controversia, anunció medidas estrictas para abordar la situación, comprometiéndose a salvaguardar la confidencialidad y el buen nombre de los afectados. En un comunicado, expresaron su rechazo contundente a comportamientos inapropiados, señalando que violan los valores institucionales y son sancionables según los estatutos y reglamentos del club.