La madrugada de este martes 25 de febrero trajo consigo la confirmación de un desenlace que nadie quería escuchar. En las playas de Marbella, Cartagena, fueron hallados los cuerpos sin vida de Juan David Mejía Suárez, de 19 años, y Ever Luis Martínez Meléndez, de 16, quienes habían desaparecido en el mar dos días atrás.
La tarde del domingo 23 de febrero, el sol caía sobre la arena cuando Juan y Ever, junto a un amigo, decidieron sumergirse en las aguas de Marbella. Tal vez no imaginaron que aquella jornada de diversión se tornaría en tragedia. Su compañero, un joven venezolano de 19 años, fue el único que logró regresar. Entre la confusión y la desesperación, alcanzó la orilla y buscó ayuda, pero Juan y Ever ya no estaban. El mar se los había tragado.
El llamado de auxilio a la línea de emergencia 123 activó de inmediato la operación de búsqueda. La Armada Nacional, a través de sus unidades de Guardacostas, desplegó un operativo en la zona con el apoyo del Distrito a través de la Secretaría del Interior. Cada ola que rompía en la orilla llevaba consigo la angustia de sus familias, que durante dos días esperaron noticias, aferrándose a la esperanza de un milagro.
En Escallón Villa, el barrio donde ambos residían, la noticia corrió como un lamento. Amigos, vecinos y familiares no dejaban de preguntarse qué sucedió en esos instantes en que los perdieron de vista. “Eran muchachos con toda una vida por delante”, se escuchaba entre sollozos en la casa de los Mejía Suárez y los Martínez Meléndez.
Pero el mar, implacable, los devolvió sin vida. Y con su partida, dejaron un vacío imposible de llenar en quienes los conocieron y amaron. “Dios los acoja en su Santo Reino”, dijo entre sollozos una familiar al enterarse del hallazgo.