La Alcaldía Mayor de Cartagena, a través del Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte (DATT), continúa despejando las vías de la ciudad mediante la inmovilización de vehículos abandonados en diferentes barrios.
Gracias a operativos de control y al apoyo de la ciudadanía y la Policía Nacional, ya se han retirado más de 150 automotores que obstruían la movilidad y deterioraban el entorno urbano.
La presencia de estos vehículos —muchos convertidos en chatarra— representa un riesgo para la salud pública y el medioambiente, pues se convierten en focos de contaminación, acumulación de basura y refugio de roedores. Además, filtran sustancias tóxicas como aceites, combustibles y líquidos de baterías, afectando el suelo y los sistemas de drenaje.
“Hace cinco años dejaron un carro abandonado frente a mi casa. No podíamos entrar una compra, ni los taxis podían llegar a la puerta. Ese carro generaba malos olores, mosquitos y ratas. Llamamos varias veces al dueño, pero nunca vino a recogerlo”, relató Maritza Rodríguez, residente del barrio Zaragocilla.
Barrios como Amberes, Lo Amador, Zaragocilla, La Troncal, El Country y Tacarigua ya han sido intervenidos por la patrulla del DATT, en una estrategia que busca recuperar el espacio público y garantizar la seguridad vial.
Cabe recordar que, al ser inmovilizado un vehículo en estado de abandono, el propietario debe asumir el pago de todas las órdenes de comparendo vigentes, como si el automotor estuviera en circulación.
El artículo 76 del Código Nacional de Tránsito prohíbe estacionar vehículos en doble fila, sobre andenes, zonas verdes o cualquier área del espacio público destinada a peatones, recreación o conservación.