_. La búsqueda de soluciones por parte del alcalde Dumek Turbay para salvar el sistema de transporte de Cartagena ha generado tensiones con el Gobierno nacional, que busca mantener su influencia en Transcaribe sin bases jurídicas sólidas.
Las recientes críticas de Dumek Turbay hacia la injerencia del Gobierno nacional en la Junta Directiva de Transcaribe, compuesta por cinco asientos con tres delegados del Gobierno, han desencadenado una controversia nacional. Esta disputa ha llevado a un enfrentamiento público con William Camargo, ministro de Transporte.
Luego de pedirle la renuncia a Patricia Hernández como gerente de Transcaribe y de no poder elegir a su reemplazo, ante el poder que tiene el Gobierno Petro en la Junta Directiva, Dumek Turbay, así como muchas voces en Cartagena, no vieron con buenos ojos la imposición de la Nación con su postulado para gerenciar el Sistema Integrado de Transporte Público de Cartagena.
Ese nombre es el de Humberto Ripoll, exgerente de Transcaribe que fue apartado de su cargo en 2020 por la grave crisis financiera con la que dejó al sistema.
Además, el Distrito considera injusto que el Gobierno nacional profundice en la recentralización, tomar decisiones desde Bogotá que afectan a Cartagena.
“Ni lavan ni prestan la batea. Protección Costera completamente abandonada por la UNGRD y el proyecto del Canal del Dique sin un horizonte claro. Por amor a Cartagena no puedo quedarme callado frente a la recentralización, cuando nosotros somos los que sufrimos los problemas a diario y en Bogotá pretenden saber cómo resolverlos”, indicó Dumek Turbay.
En su cuenta de X, Dumek Turbay, criticó la injerencia del Gobierno central en Transcaribe: “Recentralización administrativa hasta para la movilidad de los cartageneros. ¡Qué vaina! No puede ser que desde Cartagena tengamos que cargar con los problemas mientras en Bogotá se tomen las decisiones. Pues no. Vamos a hacernos cargo del problema y a tomar las decisiones para intervenir con soluciones”.
William Camargo, ministro de Transporte, le respondió que ellos son parte influyente de la Junta Directiva de Transcaribe y de su “gestión y avance”, y “en el entendido de que dicha posibilidad hace parte de quien participa con el porcentaje mayoritario de la cofinanciación del Sistema”, fue que postularon a Humberto Ripoll.
Además, Camargo mencionó que quieren seguir mandando en la Junta, y mencionó otros proyectos como el del Canal del Dique, donde es necesaria la voluntad de la Nación, aunque que en 2023 se haya liquidado el convenio de cofinanciación
Lo anterior para Dumek Turbay Paz fue una amenaza disimulada y exigió que no le echaran en cara proyectos importante y estratégicos para Cartagena.
“A los cartageneros no les cae bien que el sistema de transporte de su ciudad sea comandado desde Bogotá, así como tampoco cae bien el nombre que quieren imponer. Transcaribe nunca saldrá del atolladero mientras haya esta relación asimétrica en la Junta Directiva que nos impide gestionar soluciones inmediatas, y no estar esperando la convocatoria de una junta, si un funcionario en Bogotá se puede o no conectar, si el otro puede viajar… eso no es justo”, expuso Turbay,
Y concluyó: “Es lamentable que un ministro recurra a amenazas y descalificaciones para justificar una posición dominante e inaceptable que viola nuestra autonomía y la voluntad de nuestros ciudadanos de decidir sobre lo que los afecta. Estos son principios fundamentales de nuestro estado social de Derecho. Es decir que si nos preocupamos por la dependencia indefinida y nos negamos a aceptar posturas dominantes del centralismo, entonces nos echan en cara proyectos que se vienen tramitando? ¿Qué piensa Cartagena de esto?”.